Confiar en algo más grande que nosotros, una ayuda que venga desde arriba. Este es precisamente el sentimiento que el artista ha querido transmitir con esta obra, una escultura que de alguna manera también es una oración. Vemos representado a un hombre completamente negro, desnudo, arrodillado en el suelo y con el brazo derecho tendido hacia arriba, hacia el cielo, para iniciar la invocación. Es una postura a medio camino entre el straching y el yoga, pero también es una posición que representa el dolor, el anhelo y la desesperación ante una situación que solo puede resolverse con la ayuda de esferas más altas.
Además de un potente significado alegórico también podemos apreciar la belleza de la forma de esta estatua. El hombre se muestra con un cuerpo estilizado, perfecto, sus piernas son la base de un triángulo que culmina en la palma de su mano, se podría decir que se trata de una composición geométrica. Las medidas de esta obra son 55 cm de alto por 46 cm de ancho y 27 cm de grosor. Está totalmente realizada a mano e incluye un certificado de artesanía. En el catálogo de Arte dal Mondo también está disponible en color blanco.