Una escultura de pared de metal de importantes dimensiones y con gran encanto, centrada en un tema abstracto de estilo contemporáneo. Un conjunto de figuras geométricas, entre rectángulos, cuadrados, trapecios y círculos, confluyen y se funden con la retícula que sostiene esta obra, dando vida a un dibujo aparentemente desordenado, pero caracterizado por su intrigante coherencia interna. Cada uno de los numerosos elementos que componen este valioso cuadro de metal se caracteriza por un color y acabado de la superficie diferente. Las tonalidades dominantes son las que van del plateado al gris metalizado oscuro, mientras que los dibujos que caracterizan las diferentes piezas de la obra varían desde arabescos hasta rayas muy claras.
Embellecen la composición, añadiendo notas disonantes que interrumpen visualmente la continuidad de esta escultura de metal de pared, los ocho discos de color cobre con un borde exterior negro y una cavidad central, que como muchos pequeños anillos parecen encajar en puntos aleatorios, rompiendo la monotonía cromática de esta obra de arte.
Fruto de la creatividad y habilidad manual del equipo de ADM Design, esta fascinante obra va acompañada de un certificado de artesanía que certifica su valor y exclusividad.